viernes, marzo 18, 2005

A menudo y no tan bien por tener pie de atleta, y no lo tengo

Así que despacito, con cuidado y esperando suplir cualquier interferencia, ¡Callad y oid!, se me ocurrió juntar a dos Mónicas el otro día. He conocido tantas, Mónicas que tienen amigas que se llaman Claudia. También hay Lauras, pero las Lauras, por lo general las Lauras, ¿quién sabe por qué extraños motivos?, a pesar de tener muchas amigas, son más bien solitarias si de compañías femeninas nos referimos, son como más amigas de los hombres, pero eso podría ser una mentira, GENERE SU PROPIA VERDAD.

En fin, se me ocurrió pues esto de la reunión de Mónicas, conozco a dos muy bonitas, inteligentes, sicóloga una, abogada la otra, lo único que tienen en común soy yo, y la cantidad de hijos que pienso hacerles, sólo para perpetuar el dogma NIAHISTA, para que comprendan en carne propia lo qué es llevar un hijo del Mesías.

A la cita llegaron ambas muy puntualmente sin tener conocimiento de lo que les esperaba, nos embarcamos en conversaciones espirituales realmente interesantes, fui detallándoles a cada una como procedería a emancipar mi perspicacia a través de simples logaritmos falsos, invenciones y falacias, que bueno, no parecían comprender.

Era divertido, al principio las dos estaban como recelosas, la una de la otra, en realidad, fue muy poco lo que osaron decir, asentían, tomaban del café que les invité, me agasajaban, se generó una competencia.

Al final del día les ofrecí compañía y caricias nocturnas, ninguna de las dos aceptó, volví a casa a masturbarme mucho mucho, masturbese usted también, sonría disléxico ante cualquier Mónica, abochornelas cuando pueda y no sufra más. Es parte del principio del fin del imperio, de mi imperio, adormezca su oido interior y no tema preguntar por Pepe, seguro que le dicen Pepe también en su casa.

No se acongoje tan fácilmente, la estructura social a destruir es literalmente indestructible, sométase, escape, mírese el pupo, el pupo es el ombligo, el ombligo tiene pelusas, las pelusas hacen cosquillas, una costilla rota puede servir, y si no pregúntenle a Mr. Marilyn Manson, yo SOY vuestra EPIFANÍA... no se haga del tonot.

Anótese letras o símbolos en todo el cuerpo.

El que firma con la mano escondida dentro del pantalón Güerden Lúpulia Atonolón Soberbia, sólo para los amigos, y no los tengo!

NIAHISTA

1 comentario:

Vanessa Alanís dijo...
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